Expertas en alimentación en Tijuana: Tu Aliada Más Allá del Peso

Encontrar una profesional de la nutrición en Tijuana se parece a hallar el mejor café de la ciudad: todos conocen una favorita y cada una tiene su toque. Hay quienes llegan por preocupación, otros porque el pantalón ya no cierra, y algunos simplemente buscan estar bien. Por ejemplo, Sara asistió porque el médico le dijo: "consulta con la nutrióloga o la prediabetes te va a dar un susto". Ella pensó que saldría con una lista de prohibiciones, pero se encontró con todo lo inesperado.

En cada cita, las nutriólogas en Tijuana combinan nutrición con calidez. altusbodynutriologos.com
Te reciben como si ya te conocieran. Y sí, hacen muchas preguntas, pero nunca te juzgan. Saben lo que implica estar del otro lado del escritorio. En esas consultas, la típica frase “no puedo dejar la tortilla” se vuelve un chiste, no un castigo. Algunos pacientes incluso dicen: “por favor, no me quites las enchiladas”, y ellas encuentran alternativas posibles. Si el objetivo es mejorar tu forma de comer, lo hacen con creatividad, no con presión.

Hay nutriólogas especializadas en niños, otras en adultos mayores o gestación. Algunas entienden que pedirte comer quinoa todos los días suena tan raro como invitarte a surfear en diciembre. Otras te animan a probar papas fritas por pepino con chile y te sorprendes al ver que no está tan mal.

Ir a consulta también es enfrentar ideas heredadas. ¿Sí o no la leche? ¿Tres litros de agua? ¿Un huevito diario? Todos llegamos con dudas y consejos de la tía o el vecino que bajó veinte kilos. La nutrióloga escucha, aclara y a veces rompe creencias como quien pela una mandarina.

El primer paso es hacer un plan. El verdadero reto viene cuando abres el refri y debes elegir entre un yogur sin azúcar o el flan de la abuela. Ahí es donde entra el apoyo. Muchas nutriólogas te escriben fuera de consulta, comparten recetas y celebran tus logros: cambiar el refresco por agua mineral.

Lo mejor de la consulta no es solo lo que comes, sino la energía que te brindan. Esa sensación de no estar solo en el camino. La confianza crece, y con ella, las ganas de seguir, incluso cuando aparece un pastelito en tu ruta. Nadie te regaña por un error; saben que la vida no es siempre color brócoli.

Tijuana tiene una energía única, y las nutriólogas que trabajan aquí logran que su trabajo impacte más allá de la ropa que vuelve a quedarte o del número en la báscula. Cambian hábitos, perspectivas y, a veces, hasta relaciones familiares. Terminas la consulta convencido de que sí es posible. Solo era cuestión de ver la comida con otros ojos… y tal vez, con un poco menos de temor.

AltusBody Nutriologos en TIjuana
Av Industrial 28, Col del Prado Este, 22105 Tijuana, B.C.
664-597-3100